El Tiempo es un Canalla es una novela escrita por Jennifer Egan y publicada por la editorial Editorial Minuscula, S.l.u. en Barcelona. Ganadora del Premio Pulitzer en 2011, esta obra nos sumerge en un mundo donde los personajes principales, Bennie Salazar y Sasha, enfrentan sus propias crisis personales en un entorno marcado por la industria discográfica decadente y las complejidades de la vida moderna.
En medio de esta trama, nos encontramos con Bennie Salazar, quien tras su paso por una banda de punk en los setenta, ahora es un ejecutivo de alto nivel que recurre a métodos peculiares para mantener su apetito sexual. Por otro lado, Sasha, su asistente, lidia con su cleptomanía mediante sesiones con un psicoanalista excéntrico.
La narrativa de Jennifer Egan nos lleva a través de una red de personajes variopinta, donde se entrelazan historias que van desde una relaciones públicas intentando redimir a un general genocida hasta un periodista involucrado en un escándalo con una estrella de cine adolescente. La trama se desarrolla en ciudades como Nueva York, San Francisco, Kenia, Nápoles y el desierto de California, abarcando un período que va desde los años setenta hasta el 2020.
Con una mirada aguda y perspicaz, Egan combina lo cómico y lo trágico, utilizando técnicas narrativas innovadoras para crear una novela polifónica que refleja de manera lúcida la era digital en la que vivimos. Con el trasfondo del mundo del rock pulsando en cada página, El Tiempo es un Canalla se erige como una obra fascinante que invita a reflexionar sobre la complejidad de las relaciones humanas y el paso del tiempo.
En mi opinión, esta novela de Jennifer Egan es una obra magistral que combina de manera brillante elementos de la cultura pop, la psicología de los personajes y la crítica social. Su narrativa innovadora y su capacidad para entrelazar historias diversas hacen de El Tiempo es un Canalla una lectura imprescindible para aquellos que buscan una visión fresca y profunda de la sociedad contemporánea.